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Portaceli se despide del Teatro Español

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Tres años para desarrollar un proyecto cultural es muy poco tiempo, porque tal como estaban planteadas las bases del concurso público que gané en octubre de 2016, mi contrato era de 3 años renovables a 3 más, y aunque hay cosas que no se han terminado porque el trabajo que se estaba haciendo se verá interrumpido con mi cese, sí que es posible hacer un balance de mi gestión.

Empezaré por la parte más pragmática, importantísima por supuesto para un teatro público, pero no la única. Os paso unos gráficos de la evolución que ha habido en la ocupación y la recaudación durante mi dirección artística. Entré a finales de octubre de 2016 y me encontré con una ocupación del 32% . Me tocó programar desde enero en la Sala Principal y desde febrero en la Xirgu. En 5 meses la ocupación del teatro llegó al 54%. Al año siguiente, 2018, la ocupación subió al 75%. Al siguiente, 2019, solamente hasta el mes de junio seguimos en 75% (falta de septiembre a diciembre).

Los ingresos fueron de 787.368€ en 2016, antes de que comenzara mi etapa, a 1.325.407€ (2017), 1.498.158e (2018) a 1.073.225e (2019 hasta junio. Faltan de septiembre a diciembre). Creé abonos por vez primera en el Español, y cada vez vendemos más. Y la venta anticipada es ya un fenómeno en nuestro teatro.

He trabajado para crear un teatro integrador:

Con la Paridad, dando las mismas oportunidades tanto a compañeros como a compañeras.

He coproducido con diferentes compañías madrileñas fortaleciendo así el tejido profesional.

He dado lugar también a compañías de otras comunidades autónomas (Galicia, Catalunya, Andalucía…).

He salido a los barrios a llevar el teatro Español a través de lecturas dramatizadas creando puentes para que luego nos visiten.

He traído compañías latinoamericanas y europeas estableciendo complicidades para que nuestros autores y autoras y nuestros espectáculos se conozcan fuera de nuestras fronteras.

He fomentado el diálogo entre generaciones para que seamos capaces de valorar y respetar a nuestros mayores.

Todavía quedaban muchos proyectos por realizar, por afianzar. Como, por ejemplo, uno de los más importantes de mi programa: conseguir formar parte de Europa participando de tú a tú en los proyectos europeos, junto con los teatros europeos. Lamentablemente, aunque ya estaba muy avanzado, no tendrá tiempo de ver la luz en el Teatro Español.

Cada una de mis temporadas la he inaugurado haciendo una declaración de intenciones de los temas que atravesaban la programación anual y siempre contando con la complicidad de la profesión.

Y este año, para hablar de Las Fronteras, de todo tipo de fronteras, también se han sumado importantes corresponsales de guerra y periodistas que están aquí con nosotros para inaugurar la temporada 19/20.

Por todo esto y muchas cosas más me voy muy satisfecha ya que he podido comprobar a través de los hechos que mi gestión ha ido creciendo exponencialmente.

Quisiera pedir disculpas a todas aquellas personas que debido a las condiciones que he tenido para desarrollar todo este proyecto, ni siquiera un/a secretario/a, muchas veces no he podido llegar a contestar a todas las propuestas o llamadas tal como es mi obligación y como me hubiera gustado.

Quiero agradecer a la profesión madrileña su acogida y su complicidad de mi proyecto y de mi persona.

Quiero agradecer a mi equipo, con quien hemos trabajado cohesionados y entusiasmados este proyecto. Si no hubiera sido de esta manera, no hubiéramos llegado a hacer todo lo que hemos hecho. Porque uno no es solo lo que uno es, sino también y, sobre todo, cómo trabaja. Y cuando digo equipo, hablo de todas aquellas personas que trabajan aquí día tras día.

El proyecto, claro, era mucho más amplio. Hemos llegado hasta aquí…. En este momento me preocupa el desarrollo de esta temporada. Mi deseo sería poder acompañarla para que fuera como está soñada, para poderle dar el buen trato que merece ese esfuerzo y las personas que están en ella. Al producirse mi cese ahora no se si podré velar por ella. Ojalá las instituciones tuvieran la sensibilidad para que así fuera.

Lo que nos mueve en la vida, al menos a mí, son los sueños. Ellos me han conducido por mi camino hasta hoy. Ellos me han guiado en este camino recorrido en el Español. Y ellos me seguirán guiando también ahora.

Carme Portaceli